En el año 1961 empezamos a hacer de la hostelería nuestra forma de vida.

En el pequeño restaurante que abrimos junto al faro de Suances, pusimos nuestras ilusiones y nuestros deseos de prosperar. Y en el camino que iniciamos, los clientes se hicieron amigos y aportando su trabajo, y la idea antes lejana, se convirtió en la que ahora es El Caserío.

Si todo esto lo ven como nosotros lo vemos, aquí encontrarán nuestros proyectos convertidos en realidad a base de esfuerzo, de trabajo y del impulso que dan las ganas de superarse y de ofrecer siempre lo mejor.

Nuestro restaurante, dispone de unas amplias cristaleras con vistas, donde podrá degustar una amplia carta de comida tradicional con pescados y mariscos de Cantabria.